1887 Descubrimiento en España

En 1887, cerca de Cádiz, se hallaron tres tumbas toscas con esqueletos, instrumentos de bronce y baratijas de origen oriental. Entre ellas había un sarcófago monolítico de mármol blanco de estilo antropoide. Aunque de manufactura esencialmente fenicia, muestra una clara influencia helenística, lo que sugiere una época posterior al 429 a.C. La figura representa a un hombre maduro con rasgos nobles, cabellera recogida y barba trenzada al estilo asiático. La cabeza, tallada en alto relieve, denota la mezcla de la tradición jerárquica fenicia con el arte griego. Sujeta un fruto con la mano izquierda y con la derecha sostenía una corona ya desaparecida. Este hallazgo es único en España y presenta una completa analogía con los monumentos fenicios encontrados en otras colonias como Chipre, Sicilia o Cerdeña.